Donald Trump tiene la intención de hacer de Estados Unidos la capital cripto del planeta. El ex presidente prometió esto y más durante un discurso entusiasta dado en la conferencia Bitcoin 2024 en Nashville, Tennessee, el 27 de julio. Pero algunos de los comentarios del candidato republicano pueden haber sido motivo de consternación entre los defensores de las criptomonedas.
Si bien el discurso de Trump se centró en gran medida en Bitcoin y la comunidad que lo rodea como una fuerza positiva para Estados Unidos, expuso algunos detalles específicos. El principal de sus promesas fue que Estados Unidos no se desharía de su actual reserva de Bitcoin si él es reelecto.
Según Trump:
“Durante demasiado tiempo, nuestro gobierno ha violado una regla cardinal que todo Bitcoiner conoce de memoria: nunca vendas tu bitcoin. Si soy elegido, será la política de mi administración que los Estados Unidos de América mantengan el 100% de todo el bitcoin que el gobierno de EE.UU. actualmente posee o adquiera”.
Sin embargo, según Jameson Lopp, cofundador y CTO de Casa, “hay un pequeño problema que nadie está reconociendo respecto al plan”.
Activos de Bitfinex
El gobierno de EE.UU. supuestamente posee 212,847 bitcoin, a partir de abril de 2024. El valor total, al 28 de julio, asciende aproximadamente a USD 14,400 millones.
Parte de esos fondos provienen del exchange de criptomonedas Bitfinex. En 2022, el gobierno de EE.UU. incautó “aproximadamente 94,636” BTC de carteras asociadas con hackers que admitieron la responsabilidad de robar 119,754 BTC del exchange en 2016.
Si eliminamos esas monedas de las tenencias del gobierno, a EE.UU. le quedarían alrededor de USD 8,000 millones en BTC en sus arcas.
Leyes estadounidenses de confiscación de activos
La investigación sobre el hackeo de Bitfinex parece estar en curso. No ha habido muchas novedades desde la incautación de 2022. EE.UU. ha transferido activos relacionados con el hackeo entre carteras incluso en febrero de 2024, pero en este momento no está claro qué pretende hacer el Departamento de Justicia con los fondos.
Tampoco hay mucho precedente legal, lo que plantea una miríada de preguntas con respuestas que pueden no estar disponibles.
En primer lugar, las leyes federales sobre la incautación de activos generalmente no priorizan la restitución de las víctimas, especialmente cuando las investigaciones pueden estar en curso.
Por ejemplo, si los fondos están conectados a otros activos presuntamente vinculados a otros delitos alegados, el Departamento de Justicia estaría incumpliendo sus deberes de enjuiciamiento si devolviera una parte de los fondos relacionados antes de tomar cualquier acción correspondiente contra otros sospechosos.
También existen situaciones en las que podría ser ilegal para los agentes de EE.UU. devolver fondos robados en su totalidad a un distribuidor de fuente única. Un juez podría, en teoría, ordenar a EE.UU. que devuelva los fondos robados a los usuarios afectados bajo la supervisión de un custodio neutral.
Todo esto es meramente especulativo mientras la investigación y/o cualquier acción legal subsecuente siga en curso. Pero hay más en juego que solo las legalidades.
En segundo lugar, según la propia admisión de Trump, tiene la intención de mantener todo el Bitcoin del gobierno. Pero es posible que el presidente simplemente quisiera decir que no vendería Bitcoin con el propósito de convertir los activos en moneda fiduciaria para obtener una ganancia rápida.
En términos generales, no hay razón para asumir que Trump tiene la intención de desafiar cualquier fallo judicial que ordene al gobierno devolver los fondos.
Finalmente, Trump dijo específicamente que sería “política” de su administración mantener todo el BTC que EE.UU. posee actualmente. Aunque esto implica que está incluyendo los activos de Bitfinex, también implica que la administración permanecerá flexible.
Existe una diferencia entre una legislación o una orden ejecutiva que prohíbe la venta de criptomonedas en posesión del gobierno y una política contra dichas ventas.
Es improbable que se recuperen los fondos de Ulbricht
En lo que respecta al fundador de Silk Road, Ross Ulbricht, las cosas son un poco más simples. Ulbricht fue condenado en 2015 por cargos relacionados con el tráfico de narcóticos, hackeo y lavado de dinero. Posteriormente, fue sentenciado a cumplir “cadena perpetua” más 40 años de prisión.
En 2020, el gobierno de EE.UU. incautó 50,591 BTC que se decía robados a Ross y Silk Road en un hackeo previo. A partir del 28 de julio, esos activos representarían aproximadamente USD 3.4 mil millones de las tenencias actuales del gobierno de EE.UU.
Durante su discurso en el Bitcoin 2024, Trump prometió, si es reelegido, conmutar la sentencia de Ulbricht.
Con una conmutación, la condena de Ulbricht seguiría en pie. Básicamente sería liberado con el tiempo cumplido y los fondos, que han sido etiquetados como productos del crimen, serían transferidos al gobierno de EE.UU.
Esto es completamente diferente de un indulto, algo que el candidato presidencial Robert F. Kennedy Jr. dijo recientemente que le daría a Ulbricht el primer día si fuera elegido.
Un indulto absolvería legalmente a Ulbricht de sus crímenes y, técnicamente, proporcionaría un camino legal hacia la recuperación.
Sin embargo, Ulbricht supuestamente renunció a su reclamación sobre esos fondos en 2022 como parte de un acuerdo con los tribunales para saldar su deuda de restitución de USD 183 millones. Esto probablemente lo deja sin ninguna reclamación legal en el futuro sobre los bitcoins incautados.
Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.