El mundo blockchain ha tenido un crecimiento importante en materia de aplicaciones y desarrollo tecnológico. La blockchain de bitcoin tuvo sus particularidades y sin lugar a duda, es de las más importantes; asimismo, tenemos otras variantes de blockchain para diferentes fines, por ejemplo Ethereum de Vitalik Buterin o Hyperledger de Linux fundada por Richard Stallman. Los proyectos no paran, ahora tenemos aplicaciones como las posiciones de deuda garantizadas ejecutadas en montadas en el ecosistema MakerDAO de Rune Christensen; exchanges descentralizadas o Lightning Network creada por Joseph Poon y Thaddeus Dryja.

De lo anteriormente descrito, existe un común denominador: la mayoría de los proyectos relevantes, han sido desarrollados por hombres. Antes de continuar, es necesario aclarar, que esto no necesariamente significa que estemos en un contexto discriminatorio, sino más bien es un indicador que nos debe llevar a la reflexión para saber cuáles son las principales causas por las cuales aún existe una brecha de género en materia de desarrollo de proyectos blockchain.

El fenómeno no es aislado y requiere del análisis de diferentes variables que van desde la ciencia, la tecnología y las finanzas. Desde tiempos remotos, existe un rezago en materia científica y qué decir en finanzas o tecnología, sabemos que la participación de las mujeres ha sido limitada, en gran medida por una creencia menor en las facultades de las mujeres. Esto se observar desde la antigüedad, por ejemplo, en un texto llamado “Dios nació mujer” de Pepe Rodríguez, se documenta cómo los griegos, creían que no se podía amar a las mujeres, porque eso “devaluaba” su amor.

La problemática en el ecosistema

Son diversos campos dentro de la industria donde la participación de mujeres aún es escasa, por ejemplo, en materia de inversiones con criptoactivos, un artículo de Forbes de 2017, indicó que, de todos los usuarios, sólo del 5% al ​​7% eran mujeres y el 90% de los usuarios de Bitcoin eran hombres. Lo anterior puede deberse a cómo se percibe el riesgo, por ejemplo, existen numerosas investigaciones que indican que, la naturaleza de las mujeres es previsora y tiene una visión sistémica; es decir, al tomar una decisión, no sólo consideran el beneficio inmediato, sino que analizan diferentes aspectos (Barke, Jenkins-Smith & Slovic, 1997). Por ejemplo, en el campo del trading, muchas decisiones deben hacerse en cuestión de segundos bajo la idea de cómo obtener mejores rendimientos y menores pérdidas en un intervalo de tiempo. En el caso de las mujeres, es probable que el criptotrading no sea tan atractivo debido a la aversión al riesgo y a que, en general, las decisiones tomadas involucran una visión más a largo plazo; no obstante, el área de oportunidad para las mujeres que utilicen otros productos financieros basados en criptoactivos es grande si consideramos que, según cifras del Banco Mundial, el 56 por ciento de todos los adultos no bancarizados son mujeres. Crear mayor inclusión financiera dentro del sector a través de cuentas, permitiría transferir y ahorrar dinero, desarrollar resiliencia financiera e invertir en negocios y oportunidades educativas.

Dentro de las empresas, uno de los principales inconvenientes, es que, tanto en las Direcciones de empresas como en los Consejos de Administración, regularmente están conformados por quienes ya han sido ejecutivos en otras empresas. Por ejemplo, un estudio reveló que el porcentaje de éxito de empresas que lanzaron ofertas públicas, fue del 3.8% para aquellas que fueron fundadas por mujeres y 3.7% para quienes no fueron fundadas por mujeres. En ese sentido, la empresa Goldman Sachs indicó que, a partir de julio, no ayudaría a empresas a salir a bolsa si no contaban con mujeres en su consejo. La decisión, se ha tomado después de que analizaran que las empresas que han lanzado ofertas públicas de acciones, han tenido mejores resultados cuando cuentan con la presencia de mujeres, así lo indicó David Solomon en el Foro de Davos. Esto parece ser una “cuota” más, y eso no es lo importante porque entonces nos podría hacer creer nuevamente que se trata de una imposición sólo por una condición.

Por ejemplo, en 2016, la representación de mujeres en las juntas de empresas que prestan servicios financieros, fue del 3 por ciento y sólo el 6 por ciento en puestos Directivos, son mujeres. Con base en el estudio, se revela que existe la idea de que una mujer en un puesto Directivo puede resultar más arriesgado. Solo el 2.5% de todas las nuevas empresas respaldadas por capital de riesgo tienen un equipo fundador totalmente femenino y sólo el 9% de inversionistas de capital de riesgo invierten en empresas fundadas en su totalidad por mujeres (CityLab, 2019).

Figura 1. Representación de mujeres en liderazgo en principales empresas de servicios financieros a nivel mundial, por sector (%)

La participación de mujeres en la industria blockchain y su importancia

Fuente: Oliver Wyman, 2020.

El estudio “Women in financial services 2020” realizado por Oliver Wyman, muestra que un pequeño número de jugadores globales clave como Visa, América Express, Mastercard y Paypal que han logrado un progreso significativo, sin embargo, se observa que en el sector Fintech, y donde se incluye el sector de criptoactivos, aún permanece con una participación de mujeres menor.

Otro aspecto, es que muchas mujeres se ven obligadas a abandonar sus actividades cuando toman la decisión de ser madres. Esto es de gran importancia porque vemos cómo en muchas ocasiones, algunas mujeres prefieren sacrificar su crecimiento profesional por dar prioridad al cuidado de su familia. En ese sentido, es importante que las empresas comiencen a ser conscientes de esa situación y que, lejos de verlo como un impedimento para su desarrollo, flexibilicen dichas condiciones permitiendo desarrollar ambas actividades.

Dentro del sector blockchain, el mayor interés dentro del ecosistema ha sido dominado por el sector masculino, como mencioné en párrafos anteriores, los proyectos más destacados han sido creados en mayor proporción por hombres y vale la pena realizar un análisis causal del contexto y porqué prevalece esta situación. En materia de desarrollo de la tecnología blockchain, la tendencia indica que será una industria con mayor profesionalización en la tokenización de activos, es decir, la creación de una economía digitalizada a través de tokens. Esto, de manera natural, involucrará a todas aquellas empresas en donde exista alguna transacción o transferencia digital, y no sólo en el sector financiero, sino también dentro de la medicina, las telecomunicaciones, los bienes de consumo, etc. En ese sentido, el impacto sistémico es relevante porque, si las mujeres no logran obtener dicha capacitación en materia digital, específicamente blockchain, es probable que la brecha del empleo se acentúe mucho más. Los puestos que regularmente son ocupados por mujeres, como en tiendas o call centers, probablemente tiendan a desaparecer (Banco Mundial, 2019).

La importancia de contar con mayor participación de mujeres

Un artículo de Global Women in Blockchain (2019) destacó una comparación probablemente irrisoria pero matemáticamente real: la Tierra tiene 1.6 veces más probabilidades de tener una colisión catastrófica con un asteroide en los próximos 100 años que una startup de mujeres sea financiada por una empresa de capital de riesgo. Una de las criticas ha sido para Silicon Valey el centro tecnológico más grande en Estados Unidos, que al parecer también cuenta con un rezago sobre el fomento al desarrollo de empresas fundadas por mujeres.  Esto nos lleva aún más a pensar en cómo fomentar el desarrollo de mujeres en la industria blockchain y criptoactivos, no sólo se trata de cuotas, porque eso se traduce en imposición. La idea es que contemos con mayores incentivos para aquellas mujeres que tengan intenciones de desarrollar sus ideas. Un poco a modo de denuncia, también existen casos lamentables donde los dueños o fundadores de las empresas, colocan a una mujer como Directora de una empresa sólo con el objetivo de tener mejor reputación en el mercado y crear una imagen positiva.

Por lo anterior, existe una necesidad importante de fomentar la capacitación y reclutamiento femenino. Un ejemplo destacado, con el cuál personalmente pude colaborar, fue Laboratoria, quien fomenta la capacitación y el desarrollo de talento femenino entre otras cosas, y han logrado que muchas de sus graduadas, logren posicionarse en empresas. La importancia de contar con mujeres que se desarrollen en dicho ámbito trasciende incluso como una expectativa personal y un cambio de paradigma. Lo que requerimos es contar con más modelos a seguir, pero no sólo eso, sino también que, aquellas mujeres que han logrado escalar muchos niveles, promuevan la incorporación de otras mujeres. Y aunque de pronto podamos pensar que este trabajo ya se está realizando, no debemos olvidar que aún existen comunidades bastante vulnerables en otras regiones, principalmente en Latinoamérica o África, donde las oportunidades para las mujeres siguen siendo limitadas por fenómenos culturales que persisten desde hace décadas.

Lo relevante y valioso de una mayor participación de mujeres en el sector blockchain es que, justamente no se establezca esa diferencia y condición, sino que sean los resultados los que realmente destaquen el trabajo de las todas y cada una de las mujeres, por ejemplo en Latinoamérica, pensar en MakerDAO evoca a la figura de Nadia Álvarez, quien resulta un referente importante en dicho proyecto.

Cada muestra representativa a través de una mujer dentro del ecosistema blockchain, provocará que el respeto y equidad, tengan lugar de manera subyacente. Por ejemplo, Stacey Cunningham, presidenta, NYSE, destacó en una entrevista que su objetivo no era necesariamente romper con barreras, sino que se trataba de lograr lo que se había propuesto lograr. Por esa razón, es necesario que, desde nuestro espacio, siempre que tengamos la oportunidad busquemos las formas de cómo crear comunidad y brindar mayor confianza a aquellas mujeres con ánimo emprendedor.

Cómo crear mayor inclusión femenina dentro del ecosistema blockchain

El primer paso es tener consciencia sobre el impacto que genera mayor incorporación de mujeres dentro del sector. Es necesario comprender las motivaciones, inquietudes, pero sobre todo las barreras que limitan dicha inclusión, como las que se mencionaron en párrafos anteriores. En materia de criptoactivos, es brindar acompañamiento e impulsar la inclusión financiera y alfabetización para apoyar a otras mujeres a tener un mayor interés en el ámbito financiero y lograr un mayor número de mujeres graduadas en finanzas.

Respecto a la participación de mujeres en eventos relacionados con blockchain, se observa una baja participación en los foros de debate y conferencias blockchain. No podemos negar que, con el paso del tiempo, ha existido una participación mayor en los eventos de blockchain e incluso hemos visto páneles exclusivamente de mujeres. Lo anterior es un buen comienzo por brindar dicho equilibrio; sin embargo, crear mesas o páneles de mujeres blockchain tampoco resuelven el problema, puesto que se sigue estableciendo una segregación. Lo interesante en todo caso, sería fomentar foros de discusión en materia de inversiones o incluso de criptotrading, que incluyan la participación de ambos géneros y no sólo contar con una sección “especial”.

Por otro lado, deben existir campañas que informen a todos los niños, pero especialmente a las niñas dentro de las escuelas, fomentando un interés en finanzas y tecnología, y poco a poco reorientando la profesionalización hacía los criptoactivos y blockchain. Asimismo, que la oferta sobre el conocimiento en materia financiera brindado por mujeres que ya nos encontramos involucradas con el tema, sea mayor, puesto que, es más sencillo comenzar teniendo ciertos referentes.

Finalmente, considerar el discurso es otro factor clave, puesto que el cambio en el discurso dentro del ecosistema, estimulará el cambio de paradigma. Es necesario que las empresas destaquen los resultados obtenidos a través del talento femenino. Enviar un mensaje de equidad dentro del ecosistema blockchain, no debe realizarse desde la radicalización o una imposición indirecta hacia las empresas para que busquen incorporar mujeres sólo por el simple hecho de su condición. La inclusión y las prácticas equitativas no deben tener como estandarte el rencor o la lucha de géneros. Todo lo contrario, la equidad en cualquier ecosistema, debe ser fundamentada y como mujeres, la lucha debe ser por el reconocimiento, no por un resentimiento. Los compromisos públicos son importantes, pero para que esto tenga lugar, es necesario demostrar a través de indicadores que el cambio de mentalidad tiene sentido y no sólo se trata de una “moda”.

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