Malasia es una monarquía constitucional federal en el sudeste asiático con una población de 32 millones y un área de 330 kilómetros. Malasia tiene una economía de mercado recientemente industrializada, con un crecimiento relativamente rápido del PIB y un mercado altamente competitivo. Malasia es considerada atractiva para los extranjeros. La economía de Malasia es un productor de bienes de exportación tales como productos electrónicos, petróleo, productos químicos, maquinaria y equipos científicos que en su mayoría se venden a Singapur, China y Japón. El gobierno de Malasia no ha emitido ninguna inversión, ya que tiene una economía altamente diversificada y sólida. Regulaciones de Bitcoin: Malasia permite la minería y comercialización de Bitcoin sin restricciones. Sin embargo, el Banco Central de Malasia emitió una declaración de que Bitcoin no se considera de curso legal y sus usuarios están poco protegidos de esquemas fraudulentos y riesgos operacionales.
La hoja de ruta de tokenización del BNM pretende centrarse en casos de uso del mundo real, como la financiación de la cadena de suministro de las pymes, los productos islámicos conformes a la sharia, las finanzas verdes y los pagos transfronterizos 24/7.
Muchos usuarios de criptomonedas en línea elogiaron la decisión, pero continuaron criticando al exchange por haber congelado los fondos en primer lugar.
Un trader de criptomonedas, que afirma tener 3.100.000 dólares congelados injustamente en MEXC, asegura que se le ofreció volar a Malasia en persona para abordar la situación, lo cual ha rechazado.
El regulador de valores de Malasia está solicitando la opinión del público sobre una propuesta para permitir que determinadas criptomonedas coticen en los exchanges sin necesidad de aprobación previa.
La adopción de Bitcoin creció considerablemente en junio, con 26 empresas añadiéndolo a sus balances; mientras tanto, el hashrate de Bitcoin cayó un 15%.
El fabricante de ASIC de Bitcoin, Canaan, ha puesto en marcha una producción piloto en Estados Unidos y ha abandonado su negocio de chips de inteligencia artificial, lo que supone un giro estratégico hacia las operaciones principales de criptomonedas.
Malasia presenta un entorno de pruebas regulatorio para pagos programables y stablecoins respaldadas por el ringgit, con el objetivo de posicionarse como centro regional fintech.
El mercado mundial de criptominería podría alcanzar los 5.130 millones de dólares en 2025, pero la minería ilegal y la falta de regulación podrían limitar a Malasia.
El CEO de Hashlabs dice que los mineros de criptomonedas estadounidenses podrían apresurarse a comprar equipos de minería en medio de la pausa arancelaria de 90 días de Trump.
Se dice que Malasia está explorando regulaciones para criptomonedas después de que su primer ministro sostuvo conversaciones con líderes de Abu Dhabi y el fundador de Binance, Changpeng Zhao.
El regulador de valores ordenó a Bybit desactivar sus plataformas, cesar sus anuncios y poner fin a su grupo de Telegram para malasios.
El proveedor de servicios de monedero sufrió un hackeo de más de 100 millones de dólares en 2023
La blockchain malaya es el operador supernodo internacional de la blockchain pública Xinghuo de China.
Malasia ha fortalecido su panorama de inteligencia artificial y computación en la nube con nuevas regulaciones y colaboraciones, posicionándose como un centro de AI ética e innovación digital.
Malasia quiere hacer frente a los retos nacionales y desbloquear oportunidades económicas adoptando una tecnología de verificación biométrica de vanguardia.
