La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) llevó a cabo un curso de capacitación sobre la lucha contra la delincuencia facilitada por la red oscura o darkweb. Se les enseñó a los representantes de los organismos de represión de los países del Asia central cómo funcionan la darkweb y las criptomonedas, a fin de combatir mejor la delincuencia relacionada con las drogas.

La capacitación se realizó en cinco días y terminó el 21 de febrero, según revela un anuncio oficial.

El curso se centró específicamente en las "nuevas sustancias psicoactivas", sustitutos sintéticos de las drogas comunes que están diseñados para imitar su efecto. A menudo se consideran más peligrosas debido a su historia desconocida y a sus prácticas de producción particularmente sombrías.

Participaron en el curso, celebrado en Almaty (Kazajstán), representantes de los organismos de represión de Azerbaiyán, Kazajstán, Kirguistán, Rusia, Tayikistán, Turkmenistán, Uzbekistán y Mongolia.

Como parte del curso, los participantes aprendieron cómo funcionaba la darkweb y el papel que desempeñan las criptomonedas en los delitos relacionados con las drogas en las plataformas de la darkweb. También se les enseñaron técnicas para identificar sitios web con contenido malicioso, así como los fundamentos del anonimato y la encriptación.

La iniciativa fue organizada por la Dependencia de Asuntos Policiales Estratégicos de la OSCE y el Centro de Información y Coordinación en la Región de Asia Central (CARICC). Rustam Aziz Miralizoda, Director del CARICC, señaló la importancia de la amenaza relacionada con las drogas para la región:

“El tema de este curso de capacitación es muy pertinente para Asia central. Cada vez aparecen más sustancias psicoactivas nuevas en el mercado de drogas ilícitas de la región. El uso indebido de la darkweb y las criptomonedas representa un nuevo reto para los organismos de represión de los Estados miembros del CARICC y debe abordarse mediante una mayor cooperación regional y un mayor apoyo internacional.”

El uso criminal de las criptomonedas

Los casos en los que se atrapan a criminales usando criptomonedas aparecen regularmente en las noticias.

Como Cointelegraph informó el 19 de febrero, un tribunal acusó de tráfico de drogas a un irlandés y por ello se le confiscó su dinero en Bitcoin (BTC).

En los Estados Unidos, se acusó a un hombre en enero por traficar con drogas a cambio de BTC. En octubre se informó de un caso similar con un intérprete del ejército de los Estados Unidos.

El uso del mercado negro ha vuelto a aumentar en 2019, y ahora representa el 0.08% de todas las transacciones en criptomonedas. Aunque se puede abusar de las criptomonedas, sus propiedades también se pueden usar para localizar a los criminales. Una red de pornografía infantil de EE.UU. se cerró en 2019 en parte gracias al análisis de blockchain.

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